Unirse al Club ha demostrado ser una experiencia que altera el rumbo de Mazie, cambiando profundamente su actitud, comportamiento y circunstancias. Animada a salir de su zona de confort, aceptó nuevos desafíos con entusiasmo, descubriendo reservas de talento y potencial sin explotar dentro de sí misma. El Club se convirtió en su santuario, un refugio donde encontró consuelo y apoyo incluso en los días más difíciles. Después de días difíciles en la escuela, el ambiente acogedor del Club le brindó una presencia calmante, calmó sus nervios desgastados y le ofreció una sensación de perspectiva. A medida que se sumergía en las actividades del Club y se unía a otros miembros, Mazie sintió una nueva sensación de felicidad y energía corriendo por sus venas. Cultivó conexiones significativas y forjó amistades profundas. A través de la influencia del Club, Mazie se convirtió en una persona más segura y resiliente, empoderada para enfrentar los desafíos de la vida con gracia y optimismo.

Mazie encarna la esencia del liderazgo en su comunidad. Sin necesidad de que se lo pidan, ella fácilmente echa una mano a los miembros del personal, anticipando sus necesidades y aliviando sus cargas con una sonrisa. Su naturaleza afectuosa se extiende a los miembros más jóvenes, donde sirve como un faro de orientación y aliento, impartiendo sabiduría y amabilidad en igual medida. La firme dedicación de Mazie es evidente en su presencia constante; ella aparece todos los días, lista para contribuir y tener un impacto positivo. Su círculo de amigos se beneficia enormemente de su naturaleza compasiva, ya que escucha atentamente, ofrece sabios consejos y brinda un apoyo inquebrantable en momentos de necesidad. El carácter ejemplar de Mazie, marcado por su desinterés y dedicación a los demás, es un testimonio del profundo impacto que un individuo puede tener en quienes lo rodean.

Mazie dijo que el "Club me ha levantado el ánimo y me conecta con gente nueva todos los días.”